Día litúrgico: Miércoles II de Adviento
Texto del Evangelio (Mt 11,28-30): En aquel tiempo, respondiendo Jesús, dijo: "Venid a mí todos los que estáis fatigados y sobrecargados, y yo os daré mi descanso. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera".
PALABRA DE DIOS
Reflexión:
Descansar en Jesús nuestras preocupaciones, nuestros agobios, saber que tenemos un Padre en el que podemos descansar y estar tranquilos. Como un niño pequeño, que cuando tiene miedo deja de tenerlo porque está con su padre. Pero debemos saber, que al Padre sólo se va a través de la Cruz, del yugo de los problemas a diario; y los problemas del día a día, pueden o comernos y devorarnos o transformarlos nosotros mismos en Amor. El ejemplo de Cristo en la Cruz, es el modelo a copiar.
Alfonso Sánchez
Reflexión:
Jesús nos invita a tomar SU yugo (o sea a cumplir su voluntad que con amor se torna suave y ligera) y no nuestro yugo (efectos de nuestro pecado). Cuando vivimos según la voluntad de Dios somos felices de verdad, y si anteponemos el egoísmo o la forma subjetiva de ver la realidad, entonces no nos libraremos de la fatiga y ello no será "culpa" de Dios.
Santiago González
Vicario parroquial de Santa María del Alcor
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